Abro un paréntesis.
Tal vez un punto y aparte.
Después de tanta excursión de roca, de tanta piedra dispuesta por la geología o motivada por la necesidad, que siempre es humana, ay, por fin volví al retrato. Sí, sí, al de los desenfoques; el poco contrastado; el que me dice que me hago mayor … y lo hace en 4×5.
Había que aprovechar la ocasión, la que me brindó Lucía, que quiso hacerse fotos vestida con un disfraz de doncella medieval, para decantarme por el AeroEktar y su especialísima manera de interpretar los contraluces, otro atrezzo, este, para vestir la escena.
En esta ocasión, pues, tocó Graflex Pacemaker Speed Graphic.
En gran formato no salgo de Foma, esta vez el 200. Revelado HC-110 en dilución 1+63.





Excelente serie Antonio. Esos desenfoques que no son nada fáciles teniendo en cuenta los límites del objetivo, te han quedado espectaculares. Un abrazo
¡Muchas gracias, maestro! El AE es farragosete, pero merece la pena. Un abrazo!